Un grupo de jóvenes de la Fundación Balia visitó las oficinas de Permira para conocer de cerca el entorno laboral y descubrir diferentes trayectorias profesionales. Durante esta jornada, los asistentes pudieron no solo aprender sobre el trabajo que realiza la firma, sino también reflexionar sobre su propio futuro gracias a los inspiradores testimonios de cuatro empleados.

La actividad comenzó con una cálida bienvenida de Ignacio Faus, Partner & COO de Permira, quien explicó el enfoque de la firma: adquirir, transformar y mejorar empresas para generar impacto positivo. Después, cuatro profesionales compartieron sus vivencias personales y profesionales, dejando lecciones que resonaron profundamente entre los jóvenes.

Lucy Walker, de Recursos Humanos, relató cómo superar los errores puede convertirse en una oportunidad para encontrar la vocación. “Las historias no son siempre lineales. Me equivoqué varias veces, pero esos pasos hacia atrás me ayudaron a dar grandes pasos hacia adelante. Escuchar a quienes os conocen y apoyarse en ellos es clave para encontrar lo que os gusta”.

Por su parte, Ricardo Palacios, especialista en contabilidad, habló de esfuerzo y determinación. “No siempre fui un buen estudiante, y no pude seguir mi sueño inicial de estudiar medicina. Pero trabajé duro, estudié mientras trabajaba, y aprendí algo en cada experiencia, incluso en los momentos más complicados. Con esfuerzo, se puede alcanzar cualquier meta”.

Andrés Rebuelta, del área de inversiones, subrayó la importancia de estudiar algo que realmente motive. “Pasamos muchas horas trabajando, así que encontrar algo que os apasione puede marcar la diferencia. No hay un trabajo perfecto, pero siempre podéis buscar un lugar donde sentiros útiles y realizados”.

Finalmente, Guillermo Felez, responsable de Transformación y Proyectos, destacó tres valores fundamentales: honestidad, sinceridad y dedicación. “Si os mantenéis fieles a vosotros mismos y trabajáis con esfuerzo, podréis lograr lo que os propongáis. Lo importante es buscar algo que, en general, os guste hacer y os inspire”.

Además de conocer estas historias, los jóvenes exploraron cómo una compañía global como Permira opera en distintos sectores, descubriendo que detrás de cada empresa hay múltiples funciones y profesiones posibles.

Una Colaboración con Impacto
Esta actividad forma parte de la colaboración de Fundación Permira con Fundación Balia, que desde sus inicios ha permitido que más de 60 menores se beneficien de programas educativos y de acompañamiento. Gracias a este apoyo, se promueve no solo el aprendizaje académico, sino también el desarrollo emocional, social y cognitivo de niños, niñas y adolescentes, brindándoles herramientas para construir un futuro mejor.